Las tarifas de los peajes de las autopistas subieron un 7,5 por ciento el pasado 29 de julio
El viceconsejero de Turismo y Comercio, Antonio Jesús Roldán, expresó ayer el rechazo de su departamento al incremento de los precios de los peajes de las autopistas AP-4 que une Sevilla y Cádiz y AP-7 entre Cádiz y Málaga y advirtió de que este aumento, «ocasionado por las medidas del Gobierno central, tendrá un impacto muy negativo tanto en la actividad turística como comercial de la comunidad».
Roldán apuntó que, por un lado, la decisión «repercutirá sobre el coste del viaje de los turistas que visitan Andalucía a través de estas vías» y, por otro, «supondrá una traba para el intercambio de mercancías al aumentar también los gastos de transporte». Por ello, insistió en el «impacto negativo de esta medida sobre la actividad turística y económica». Además, alertó de que el aumento de las tarifas de los peajes se sumará a la subida del IVA que el Gobierno central aplicará a partir de septiembre, por lo que señaló que «propiciará un doble castigo a las provincias afectadas y a los andaluces en general». Finalmente, lamentó que «sistemáticamente» se «hayan incumplido las promesas» para eliminar los tramos de pago de estas carreteras.
Las tarifas de los peajes de las autopistas subieron un 7,5 por ciento el pasado 29 de julio, una vez que el Ministerio de Fomento suspendió la bonificación que otorgaba hasta ahora a las concesionarias, que repercuten la medida en los clientes. La subida del IVA ocasionará otro aumento, con lo que los precios subirán un diez por ciento.
EP